Eternals tiene una producción impecable. La película, como nos imaginábamos que iba a ser, se siente enorme. Tiene unas proporciones tanto en el tiempo y en el espacio que se hacen más grandes que el espacio vital del ser humano, y eso se nota. Consigue transmitir al espectador el estar viendo la historia des del punto de vista de un Celestial que se asoma al planeta a espiar. Y eso es tan bueno como malo.

Demasiados personajes

Se nos ha vendido Eternals como una película coral. Una película protagonizada por la familia de los Eternos a través de los milenios. Pero nada más alejado de la realidad. La película tiene una clara protagonista, Sersi y podríamos decir que varios villanos. El resto de Eternos son un conjunto de secundarios, algunos que sirven como alivio cómico y otros que tienen un poco más de trama y que prometen a futuro.

Esto es uno de los puntos negativos de la película. Por mucho que nuestra protagonista sea única y consigamos empatizar con ella, hay personajes que sobran. Con razón dura dos horas y media. Y el otro gran problema con ellos es que no son humanos. Es difícil empatizar con gente que tiene 7000 años y ya se han pasado la vida en modo difícil.

No todo es malo en los personajes y el reparto. Tenemos, por fin, una representación poco forzada y muy tierna de un personaje gay en Marvel. También tenemos a un personaje sordomudo que habla en lenguaje de signos (aunque creo que en esta peli pega poco) y hay un absoluto descubrimiento. Lia McHugh es el descubrimiento de la película. Sí, Gemma Chang y Richard Madden llevan la película encima de sus hombros sin problema, pero es Lia McHugh la que no para de comerse a gente en pantalla. Una buena roba-escenas con solo catorce años.

Lo que ha sido decepcionante es lo poco que salen ciertos actores y actrices de renombre. Por una vez que Kit Harrington estaba gracioso y resulta que solo me lo presentan para futuras entregas.

Si algo esperaba la gente de Chloé Zhao era un mensaje profundo y filosófico. Por decirlo de alguna forma, la película gafapasta del UCM. Puede que no sea así pero el mensaje es bastante bonito. Eternals es una película que habla sobre lo que nos hace ser humanos. Habla del amor (se dice mucho ‘te quiero’ dentro de la película) y sobre todo habla del ser humano, de lo que nos hace especiales. Habla de lo más oscuro y de lo más luminoso de la sociedad. Pone sobre la mesa la violencia, el avance tecnológico, la capacidad de evolucionar. En definitiva la película habla bien del ser humano des del punto de vista de unos aliens.

Empezamos un nuevo Endgame

Quién no quiera nada spoilers que no se lea este párrafo, pero esto hay que decirlo. Eternals termina fuerte. Puede que sea una de las escenas más potentes desde Endgame. Parece, al menos eso es lo que he entendido yo como lector de comics, que el próximo «Endgame» van a ser las «Secret Wars». Si alguien lo desconoce mejor, que cuanto menos sepa más va a disfrutar.

¿Tan pronto? Yo digo que ya era hora. Si cumplen lo que parece que prometen al menos quedan ocho años de desarrollo de personajes para volver a vivir epicidad sin igual en el cine. Y con esa promesa me quedo yo. Eternals en mi cabeza se salva muy fuerte por esta escena.

Conclusión de ‘Eternals’

Eternals es una de esas películas que a la larga nos daremos cuenta que habrá cambiado el curso del UCM. Puede que no sea una película tan grande como pretende pero tampoco es tan mala como nos han querido hacer creer. En su favor diré que pese a que había dormido tres horas no me dormí en el cine y eso que la película dura dos horas y media y no es precisamente una comedia ligera.