La que promete ser la comedia musical favorita de los más pequeños se podrá disfrutar en cines a partir del viernes 21 de octubre al son de las voces de Javier Bardem y Shawn Mendes

Un cuento infantil

La comedia musical que han rodado Josh Gordon y Will Speck no es una historia original, sino la adaptación de uno de los cuentos de su infancia: Lyle, Lyle, Crocodile. Esta pequeña historia ya había sido llevada al cine en un especial de HBO. En el especial Lyle,Lyle, Crocodile: The Musical – The House on East 88th dirigido por Michael Sporn y con música de Charles Strouse, se adaptan los dos cuentos infantiles que narran las aventuras de Lilo el cocodrilo. El primero, publicado en 1962, se tituló The House on East 88th, mientras que el segundo ya llevó por nombre Lyle, Lyle, Crocodile y se publicó tres años más tarde. Estas dos pequeñas historias, salidas de la imaginativa mente del escritor de libros infantiles Bernard Waber, dieron lugar a la Lyle Series y a múltiples aventuras del cocodrilo Lilo.

Josh y Will buscaban dirigir una película de este libro de su infancia a la manera en que otras adaptaciones de libros infantiles han alcanzado el éxito en la gran pantalla. Es el caso de obras como Charlie y la fábrica de chocolate, Alicia en el país de las maravillas, o incluso Shrek.

Bardem y el musical

La película producida por Hutch Parker Entertainment y Sony Pictures Entertainment (distribuida por Columbia Pictures) cuenta con la colaboración de uno de los más exitosos actores españoles: Javier Bardem. El marido de Penélope Cruz y ganador del Oscar en 2007, se enfrenta en esta ocasión a todo un reto interpretativo: el musical. Viniendo de ser nominado nuevamente a los premios de la Academia por su papel como Desi Arnaz (actor y músico cubano) en Ser los Ricardo, el intérprete nunca había estado tan cerca del musical. Es por esto que Lilo, mi amigo el cocodrilo llega en un momento idóneo.

Estupefacto ante la oferta de actuar junto a un cocodrilo que canta con la voz de Shawn Mendes en una comedia familiar (género también poco explorado por el actor español, cuyos papeles se mueven en historias más adultas) se preguntó por qué no elegían los productores a alguien como Hugh Jackman. Para Bardem, fan incondicional y declarado del musical El Gran Showman, el actor australiano era la mejor opción. No obstante, a esta réplica los productores le contestaron que su personaje precisamente no tenía que cantar muy bien. Bardem comprendió entonces y, después de que sus hijos le dijesen que querían verle cantar con un cocodrilo, se lanzó a la aventura.

Comedia para toda la familia

Esta historia sobre un chico (Winslow Fegley) que se muda a Nueva York junto a su familia (Constance Wu y Scoot McNairy), al que le cuesta adaptarse y cuya vida cambia al conocer a Lilo, un cocodrilo que canta, supone un entretenimiento familiar, cómico, empático e inspirador. Y esto la crítica lo ha puesto de relieve, señalando cómo los directores de películas como Fiesta de empresa y Un pequeño cambio han conseguido llevar a la gran pantalla una historia aparentemente absurda, pero que desprende honestidad, dulzura y emoción.

Este viernes 21 de octubre los más pequeños podrán bailar y divertirse al ritmo de Lilo, mi amigo el cocodrilo.

 

Pablo S. Lucientes