«La isla de Bergman»: un verano en Suecia

La isla de Bergman, el drama romántico dirigido por Mia Hansen Love y presentado en Cannes el año pasado, llega por fin a las salas españolas este viernes 1 de julio.

Fårö, Suecia

Más que con Bergman -o más allá que con su cine- la nueva película de la realizadora francesa Mia Hansen-Løve se basa, inspira y dialoga con la isla tan querida por el legendario realizador sueco. Fårö tiene 110 kilómetros cuadrados, se sitúa en el Mar Báltico, cerca de la isla de Gotland, y fue donde Ingmar Bergman rodó algunas de sus obras maestras (entre ellas Persona y Pasión).

Løve la utiliza como telón de fondo para la historia de una pareja de cineastas, Tony y Chris (interpretados respectivamente por Tim Roth y Vicky Krieps), quienes viajan a la isla en busca de inspiración para sus próximos proyectos. El primero adora el cine del realizador sueco, mientras que la segunda lo detesta como persona. Su relación se pone en cuestión durante su estancia en este paraje idílico que hizo de refugio para Bergman durante su vida y en el que descansan sus restos desde 2007.

La isla de Bergman/ La isla de Løve

Mia Hansen-Løve e Ingmar Bergman comparten en su cine cierta implicación personal, autobiográfica, casi metafísica o espiritual. Tanto el sueco como la francesa buscan a través de metáforas purgar sus culpas o sublimar sus sentimientos con la cámara, convirtiendo la imagen cinematográfica en un método de autoconocimiento, cuando no directamente en terapia. 

Bergman se instaló en Fårö y rodó allí sus obsesiones, sus fobias, sus celos y, en definitiva, sus más oscuros miedos. Løve, por su parte, no es tan negativa ni paranoica. Ella misma lo declara: “Bergman buscaba mirar cara a cara a sus demonios”, mientras que su película trata de ser una vía de escape. Para ello huye del tono asfixiante y la estética deprimente de los filmes del sueco, y retrata la isla de manera mucho más luminosa, con un cariz más esperanzador. En este sentido, la película de la realizadora francesa consigue hacer suya una isla que por respeto pudoroso al mito que fue el director de El séptimo sello se consideraba imaginería exclusiva de la obra del realizador sueco.

Autoficción terapéutica

El cine de Bergman está repleto de referencias a su vida. Desde la autobiográfica Fanny y Alexander -obra mastodóntica que relata su infancia- hasta Secretos de un matrimonio –probablemente el más ambicioso de todos los filmes en los que explora los conflictos de su vida conyugal-, sus películas sirven como catalizador para sus vivencias.

Como gran admiradora del sueco, Mia Hansen-Løve se acerca de un modo similar a su cine, atravesado siempre por sus experiencias. En La isla de Bergman su proceso creativo no ha cambiado. La historia de dos cineastas que son pareja y viajan juntos en busca de inspiración mientras su relación se resquebraja está indudablemente ligada a la vida de la cineasta y a su relación con Olivier Assayas (Irma Vep, Personal Shopper),  famoso director francés.

La ruptura de la pareja, que había estado unida desde 2009, es el punto de partida creativo para esta historia en la que Tim Roth y Vicky Krieps encarnan los alter egos de la pareja de realizadores. En ella -y junto a Anders Danielsen Lie (La peor persona del mundo) y Mia Wasikowska (Alicia en el país de las maravillas)-, realidad y ficción se van intercalando en un ejercicio autobiográfico, introspectivo y terapéutico.

Recibimiento y paso por festivales

La crítica ha alabado la aparente ligereza de la película, y la forma en que, tras un velo veraniego y sosegado, esconde una profunda reflexión sobre la creación artística y el amor. A esta buena recepción de la crítica se une su paso en 2021 por el Festival de Sevilla y el Festival de Cannes, donde este último año se pudo, ver Un beau matin, la última película de Løve, la cual fue proyectada en la Quincena de realizadores.

La isla de Bergman es uno de los estrenos más delicados, reflexivos y profundos del año. Desde este 1 de julio se puede ver en las salas españolas, donde destaca como una de las ofertas más veraniegas de la cartelera.

Pablo S. Lucientes