Trece años después del estreno de su primera entrega, James Cameron regresa a salas con la primera de las cuatro secuelas que tiene preparadas para la saga Avatar.

Soñar a lo grande

James Cameron tocó el cielo en 1997 con Titanic, película con la que ganó la friolera de 11 Oscars y que se convirtió tras su estreno en la más taquillera de la historia. Tal récord no fue batido hasta que el mismo director estrenó su siguiente película: la mastodóntica Avatar. Desde entonces parecía imbatible, hasta que llegaron los superhéroes de MARVEL, quienes destronaron a los azulados habitantes de Pandora con Vengadores: Endgame.

Este 2022, Cameron regresa con la primera de las cuatro secuelas de la saga Avatar que prometen estrenarse. Con ella no solo ha empujado los límites de las posibilidades digitales en cuanto a captura de movimiento, sino que también pretende conquistar al público y recuperar su puesto como director más taquillero de la historia. 

El director de bombazos tales como Aliens o Terminator ha sido siempre un enamorado de los efectos especiales, los cuales ha hecho evolucionar en proyectos alocados de ciencia ficción tales como el que estrena este viernes. Su personalidad irreverente lo ha llevado a ser uno de los más exitosos directores vivos, tan solo superado en cuanto a recaudación por Michael Bay, Peter Jackson y Steven Spielberg. Así, Cameron se ha convertido en uno de los maestros del blockbuster.

El proyecto

La saga Avatar lleva gestándose desde 1994, cuando la idea ya fue anotada por su creador. En 1996, Cameron tenía la intención de comenzar con la producción de la primera entrega nada más terminara el rodaje de Titanic. Por aquel entonces guardaba una gran esperanza (bastante loca visto hoy día) en las posibilidades de los actores sintéticos y las imágenes generadas por computadora. Al ver que no eran suficientes para las expectativas de su proyecto (por aquel entonces Pixar daba sus primeros pasos) fue retrasando poco a poco el rodaje de la cinta. No fue hasta 2006 que pudo embarcarse en el proyecto.

Desde el estreno de la primera entrega en 2009 han pasado 13 años, todos imprescindibles para conseguir la tecnología adecuada para la imagen soñada del director. Para ello se contrató a la empresa neozelandesa de efectos digitales Weta Digital y, tras numerosos retrasos, comenzó la producción de las secuelas.

A día de hoy se sabe que Avatar 2 y 3 fueron rodadas simultáneamente, que la cuarta entrega está parcialmente grabada y que la quinta cuenta ya con un guion terminado. Además se rumorea que puede que ésta no sea la última historia de la franquicia, con lo que se puede confirmar que tenemos Avatar para rato (aunque no sabemos para cuanto).

Reparto

Para el regreso a Pandora y el reencuentro con los Na’vi (la raza de humanoides extraterrestres que habitan la luna ficticia) Cameron ha vuelto a contar con algunos de los intérpretes de la primera entrega. Sam Worthington regresa como Jake Sully y Zoe Saldana como Neytiri, ambos en los roles protagónicos que ya encarnaron en 2009. Además, se repite la presencia de Stephen Lang como el general Miles Quaritch y de Sigourney Weaver que, tras la muerte de su personaje en la primera película, vuelve para interpretar a sus 73 años a Kiri, la hija adolescente de la pareja protagonista (?).

Completan el reparto principal la inconfundible Kate Winslet, Joel David Moore, CCH Pounder y Jamie Flatters como el hijo primogénito de Jake y Neytiri.

La crítica

Ya se han podido conocer las primeras reacciones a la película, las cuales han sido bastante positivas. No solo se ha bautizado la cinta como una obra maestra del 3D y los efectos digitales, sino que se ha destacado su historia, llena de emoción familiar y absenta del complejo de “white savior” que impregnaba la primera entrega. Algunos han llegado incluso a afirmar que El sentido del agua (subtítulo de esta secuela) es mucho mejor que la primera entrega.

La tan esperada secuela de Avatar llega a salas en riguroso 3D este viernes 16 de diciembre.