La nueva película de Sam Mendes llega a salas este viernes 31 de marzo.

Retorno al pasado

No es extraño ver cómo directores consolidados ruedan en los últimos años películas cada vez más personales. La edad aprieta y, con ella, los recuerdos de una infancia romántica en la que el cine tiene un lugar privilegiado exige su derecho a ser filmada. Es el caso de Los Fabelman o, este último año, de Armagedon Time. También es el caso de El imperio de la luz.

Tanto Spielberg como James Gray han vuelto para contar una historia autobiográfica, de cómo crecieron y descubrieron sus pasiones. En el caso de Mendes, no es tan así. Su película busca explorar a su madre sin atenerse exclusivamente a lo autobiográfico, aunque sean sus recuerdos y él decida los planos. Tiene un anclaje, no hay duda, en su memoria, pero el objetivo es más amplio: rodar un drama romántico en la inglaterra de los años 80, atravesada por el racismo institucional, y en la que el director encuentra la forma de introducir el tema de la salud mental a través del personaje de Olivia Colman, alter ego de su madre.

En el centro de este tipo de relatos tan autobiográficos está el cine, y en la película de Mendes no es de otro modo. La cinta gira en torno a un cine antiguo que aúna toda la luz (y sombra) de las pasiones que hacen tambalear a los seres humanos.

Sam Mendes

El realizador británico, que llegó a la cumbre de su carrera en 1999 con American Beauty, mira atrás a su pasado en El imperio de la luz. Ganador del Oscar a Mejor director ese mismo año, Mendes ha demostrado ser un director solvente que lo mismo puede manejar proyectos bélicos (Jarhead) que de época (Camino a la perdición) o incluso abordar un drama romántico (Revolutionary Road). 

Responsable de la proeza técnica que es 1917, el director fue seleccionado para dirigir nada menos que dos entregas de la saga sobre el agente secreto británico más famoso de la historia: James Bond. Así, Mendes se ha convertido en uno de los directores más exitosos y versátiles de la industria, convirtiendo películas que llevan su sello autoral en éxitos de crítica y público.

Con El imperio de la luz el realizador busca rendir tributo a una época que es la suya, en la que se crió, al tiempo que muestra su amor por el séptimo arte en un drama romántico lleno de grandes interpretaciones.

Recibimiento

El imperio de la luz ha estado presente en los Oscar y en los Globos de Oro siendo muy aplaudida la fotografía del ya legendario Roger Deakins (Prisioneros, No es país para viejos e incontables más) y la soberbia interpretación de Olivia Colman (Oscar a mejor actriz por La favorita) la cual es para algunos su más destacada aparición en pantalla. Además, la crítica ha ensalzado la elegancia y la belleza formal de la cinta, que muestra un gran amor por el cine como experiencia compartida.

El estreno de El imperio de la luz está programado para este viernes 31 de marzo.