«El gato con botas: El último deseo»: ocho de nueve vidas
El famoso personaje de la saga Shrek regresa con una secuela en solitario este miércoles 21 de diciembre.
Un gato con botas
La famosa figura de un gato erguido que habla y se calza unas botas es conocida hoy día por encima de todo por su aparición en la saga paródica de libros infantiles Shrek. No obstante, su origen se remonta mucho antes de la invención del cinematógrafo, incluso es previo a la obra que le dio la fama y que fue escrita por Charles Perrault, habiendo ya referencias a esta figura al menos cien años antes de la publicación de su famoso cuento.
El cuento de Perrault, publicado en 1695, se hizo famoso por su ambigüedad moral. Y es que el adaptador de cuentos tradicionales y moralistas de la época como La bella durmiente o Barba azul, se salió del corsé ético de la época para presentar a un pícaro gato antropomórfico. La moraleja de la historia, lejos de empujar a actuar bien, invita a utilizar la mentira, el engaño y el ingenio para conseguir lo que uno desea, implicando que el camino más corto sirve mejor que el que es considerado correcto.
No es de extrañar que una figura así cautivara al público entonces y que todavía hoy día siga generando atractivo. Es por ello que hoy el personaje regresa a las salas de cine sin perder ni un ápice del fondo macarra que lo hace especial.
De la ilustración a la animación
Desde la publicación en 1695 del cuento de Perrault ha habido representaciones iconográficas del gato con botas. No es sorpresa que se elija la animación para trasladarlo al cine, siendo una figura imposible en la vida real: un gato que se mueve como un hombre, calza unas botas y blande una espada.
Desde su aparición como secundario en Shrek 2, el personaje de cuento se ha convertido en uno de los más queridos por parte del público. De hecho, es el único de la saga que ha contado con una película propia: la estrenada en 2011 y dirigida por Chris Miller. A ella le sigue este 2022 El gato con botas: el último deseo, una secuela que, si bien continúa la historia del felino recuperando personajes de la primera entrega, se ve bien diferente.
DreamWorks le ha dado una vuelta a la estética de la primera entrega desde que comenzase a desarrollarla allá por el 2014. La animación 3D habitual en los proyectos de PIXAR y la saga Shrek deja paso en esta última producción a la combinación del cgi con la animación tradicional en 2D, generando una imagen que se asemeja al dibujo en acuarela, más cercana al espíritu de cómic de Spider-man: Un nuevo universo que al grueso de películas de animación que suelen producirse.
Una vida para un personaje
Antonio Banderas ha vuelto a ponerse en la piel del carismático compañero de Shrek en esta secuela al spin-off de 2011. En ella, el gato con botas debe enfrentar al hecho de haber gastado 8 de sus 9 vidas, haciendo frente al vértigo humano de la mortalidad.
Acompañándolo está de nuevo Salma Hayek, quien interpreta nuevamente a Kitty Patita suave, la novia del protagonista. Al reparto de doblaje en inglés se han unido actrices de la talla de Florence Pugh y Olivia Colman.
La crítica
La película se presenta ante el público habiendo cumplido las expectativas de la crítica, la cual ha dicho de ella que es divertida, inteligente en su uso de los tropos fantásticos y cautivadora en todos sus matices existenciales. Además, se ha alabado nuevamente la inconfundible voz de Antonio Banderas, quien dobla a su personaje tanto en castellano como en inglés.
El gato con botas: El último deseo se estrena este miércoles 21 de diciembre.