«El reino del planeta de los simios»: Ciencia ficción en estado puro

La nueva película de la saga primate que destaca por su técnica y excepcionalidad visual que no decepcionará a sus fans.

Entre Cameron y Kurosawa

Wes Ball se ha enfrentado a una tarea colosal al dirigir esta nueva entrega, por lo que ha buscado inspiraciones colosales: el estilo del legendario director napón Akira Kurosawa y la destreza técnica de James Cameron. Ball enfatiza la importancia de la ambientación para la película, buscando crear un mundo vívido y realista, similar a la sensación que ofrece Pandora en el Avatar de Cameron, aunque reconociendo las limitaciones presupuestarias que separan a ambas sagas. Su objetivo era fusionar efectos visuales y CGI con un entorno de vegetación exuberante, mostrando los vestigios envejecidos de l civilización humana en un mundo dominado por los simios, subrayando la decadencia de objetos y estructuras en un mundo postapocalíptico. Fuente: Collider

Franquicia sorpresa

¿Sabías que nadie tenía fe en el triunfo del original ‘Planeta de los Simios’? El productor Arthur P. Jacobs intentó comercializar los derechos en Hollywood, pero pocos respaldaban el proyecto, ni siquiera el autor de la novela, Pierre Boulle. De hecho, Boulle consideraba este libro como uno de sus trabajos menos destacados. Al final, 20th Century Fox adquirió los derechos, aunque surgieron muchas incertidumbres, especialmente por razones técnicas. Para persuadir a los ejecutivos, el productor filmó una prueba de caracterización con Charlton Heston. Resultó suficiente para obtener la aprobación de los altos mandos, quienes accedieron a realizar la película. Fuente: Diario AS

Recibimiento

La crítica española ha alabado el apartado técnico de la película así como el imponente universo visual que ha creado Ball en esta nueva entrega de la saga de El Planeta de los Simios, sin olvidarse de destacar que ha conseguido aportar nuevas visiones interesantes a la historia a nivel narrativo, consiguiendo así captar la atención del espectador tanto por sus efectos visuales como por la historia que está contando.