«Slow»: deconstruyendo el deseo

La película seleccionada por Lituania para los Oscar llega a salas este viernes 19 de enero de la mano de Surtsey Films.

Asexualidad 

Aunque no muy explorada por formas de expresión artísticas como el cine o la literatura, la asexualidad existe. Se trata de una tendencia sexual que se caracteriza por no sentir atracción sexual hacia otras personas o sentirla con poca intensidad. Comparte la sigla “A” del colectivo LGTBIAQ+ con el arromanticismo, aunque una persona asexual no tiene porqué ser arromántica. 

Muchos mitos envuelven y dañan a las personas asexuales. Algunos de ellos son la idea de que es una moda o una elección, o el prejuicio de que, al no querer mantener cierto tipos de relaciones, no son capaces de enamorarse. Sin embargo, las personas asexuales se masturban e incluso mantienen relaciones sexuales, ya que el líbido no es la única razón por la que tener sexo, sino que esas prácticas pueden darse por muchos otros motivos (juego, curiosidad, tener descendencia…).

La última película de Marija Kavtaradze desafía los prejuicios y cuenta una historia de amor sin sexo; el encuentro entre dos personas, una de ellas asexual, es el punto de partida para una romántica historia sobre los vínculos que construimos y las necesidades que esperamos que satisfagan.

Marija Kavtaradze

La joven realizadora lituana escribe y dirige Slow, un drama romántico valiente sobre la asexualidad por el cual ha sido seleccionada para representar a su país en los Premios Oscar. Su segundo largo tras el drama juvenil sobre bipolaridad y suicidio que supuso su debut (Summer Survivors) confirma el talento todavía en ciernes de una autora europea con identidad propia. 

Slow aborda de manera frontal la asexualidad, algo que no ocurre prácticamente nunca en el cine; pero para su directora esta película es sobre todo un relato sobre la honestidad con uno mismo. En él, la danza ocupa un lugar central, ya que es el modo de vida de su protagonista y el medio a través del cual Kavtaradze considera que todo puede ser expresado.

Orgullosísima de la bailarina Greta Grineviciute, que interpreta a Elena, figura central del filme, la directora se deshace en elogios, concediéndole ya en su debut el título de “actriz profesional”. Junto a directora y actriz, Kestutis Cicenas cierra un triángulo perfecto para un relato emotivo y cautivador no exento de conflictos que remueven las conciencias a la audiencia.

Recibimiento

A su preselección a los Oscar, Slow ha sumado un laureado paso por el Festival de Sundance. De ella la crítica ha destacado su profundidad psicológica, así como la verosimilitud de un relato nunca antes así contado que confirma a Kavtaradze como una de las más interesantes voces del cine europeo reciente.

Distribuida por Surtsey Films, Slow se estrena este viernes 19 de enero.